Basta con decir que todo comenzó como cualquier día, solo que yo tenía boletos para el estreno de aquella peli de zombis que todos querían ver, me parece increíble como todo puede cambiar en tres segundos, todo comenzó por un absurdo experimento de saber si los zombis podían existir. Y por supuesto, todo en mi vida era tan normal que en serio era genial. Como decía, fui al cine y sospeche que las cosas iban mal cuando el chico de las palomitas trato de morderme… en un poco de ingenuidad pensé en Hannibal Lecter, pero ¡Joder! Que Hannibal Lecter no babeaba chorros de sangre.
En un intento de salvación conduje un auto, olvidando por completo que apenas sabía manejar, por lo cual me lleve un par de botes de basura y a mi mejor amiga.
“ups” fue mi reacción, pero no te sientes tan mal después de que te haya intentado comer en una parrillada de domingo por la tarde.
Así me la pase por tres semanas solo conduciendo de aquí para allá, admirando como las cosas iban de un caos al apocalipsis total. No dejaba de pensar en el programa con aquella entrevista y el presidente que afirmaba que un muerto no podía reanimarse.
Poco tiempo después lo vi correr perseguido por una horda de zombis y solo pensé “que idiota” unos días después cuando solo quede yo como sobreviviente se así pues pensé que sería bastante aburrido así que decidí construirme un amigo, y de un árbol en donde crecían hongos mágicos hice un títere que decía que se llamaba Pinocho y que quería ser un niño de verdad, estaba tan loco de decidí cortarle la cabeza y dársela de comer a un burro, que iba de paso vendiendo plantitas, el burro muy contento me agradeció y me dio en recompensa una macetita llena de platitas mariguanescas las cuales ocupe para hacer brownies de mariguana los cuales les añadí nicotina para que se hicieran adictivos pero como me gaste todo mi capital en esto los vendí en mi escuela. Pero como todos eran zombis nadie me compro, entonces hice una hoguera para llamar a E.T. con señales de humo y que se comiera mis pastelitos entonces se hiso dependiente de mis pastelitos pero ya no había materia para hacerlos entonces se volvió histérico golpeado su cabezota contra una pared y así reventó liberando unas esporas que curaron a los zombificados en enanos y siempre iban en grupos de siete todos diciendo que tenían el de cada uno de los días de la semana. Entonces como siempre odie a los siete enanos de blanca nieves les volé la cabeza todos menos a los domingos por que siempre me cayeron bien.
Pasados los días me aburrí también de los domingos, así que los puse a trabajar en el campo para que pudiera hacer mis brownies con mariguana y nicotina y después se los di de comer y se volvieron tan adictos que se convirtieron en Lady Gaga, pero ya era bastante enfermizo tener a mas de una Lady Gaga así que tuve que buscar la barita de sauco para convertirlos en niños de verdad y después de eso vieron a Jepeto y en unisonó dijeron todos…¡Papá, papá, soy un niño de verdad! Esto molesto tanto a Jepeto que saco una AK47 y les disparo pro no le dio a ninguno y del susto se fueron a las vegas en donde se casaron con 50 bailarinas exóticas con las que tuvieron 90 hijos deformes y se dedicaron a trabajar como negros en una empresa americana en donde venden pollos fritos, así al final se dieron un tiro en la cabeza y yo pude regresar a ver mi peli de zombis con tranquilidad.
FIN
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